Esta página emplea tanto cookies propias como de terceros para recopilar información estadística de su navegación por internet y mostrarle publicidad y/o información relacionada con sus gustos. Al navegar por este sitio web usted comprende que accede al empleo de estas cookies.

PLM-Logos
Bandera Colombia

SINALGEN 5 MG/325 MG  / SINALGEN FORTE 7,5 MG/325 MG  / SINALGEN MAX 10 MG/325 MG Tabletas
Marca

SINALGEN 5 MG/325 MG / SINALGEN FORTE 7,5 MG/325 MG / SINALGEN MAX 10 MG/325 MG

Sustancias

HIDROCODONA, PARACETAMOL (ACETAMINOFÉN)

Forma Farmacéutica y Formulación

Tabletas

Presentación

1 Caja, Blíster, 10 y 30 Tabletas,

Caja, Blíster, 1 y 2 Tabletas,

Caja, Blíster, 90 Tabletas,

CÓDIGO MIPRES:

SINALGEN® 5 MG/325 MG. Principio activo: Hidrocodona. Código Mipres: 0 1700. Principio activo: [Acetaminofén] 325 mg/1U; [Hidrocodona bitartrato] 5mg/1U. Código Mipres: 75

SINALGEN FORTE®. Principio activo: Hidrocodona. Código Mipres: 0 1700. Principio activo: [Acetaminofén] 325 mg/ 1 U; [Hidrocodona bitartrato] 7,5 mg/1 U. Código Mipres: 4507

SINALGEN MAX®. Principio activo: Hidrocodona. Código Mipres: 0 1700. Principio activo: [Acetaminofén] 325 mg/1 U; [Hidrocodona bitartrato] 10 mg/1 U. Código Mipres: 4615

INDICACIONES Y USO: Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén se indican para el alivio de dolor moderado hasta moderadamente severo.

FARMACOCINÉTICA: El comportamiento de los componentes individuales se describe a continuación.

Hidrocodona: Después de una dosis oral de 10 mg de hidrocodona administrada a cinco sujetos masculinos adultos, la concentración pico media fue 23.6 ± 5.2 ng/mL. Los niveles séricos máximos se alcanzaron a las 1.3 ± 0.3 horas y se determinó que la vida media era 3.8 ± 0.3 horas.

La hidrocodona exhibe un patrón complejo de metabolismo que incluye O-desmetilación, N-desmetilación y reducción de 6-ceto a los correspondientes metabolitos 6-α- y 6-β- hidroxi- (véase Sobredosis en busca de información de toxicidad).

La N-desmetilación mediada por el CYP3A4 a norhidrocodona es la principal vía metabólica de la hidrocodona con una menor contribución de O-desmetilación mediada por el CYP2D6 a hidromorfona. La hidromorfona se forma a partir de la O-desmetilación de la hidrocodona y puede contribuir al efecto analgésico total de la hidrocodona. Por lo tanto, la formación de estos y otros metabolitos relacionados puede, en teoría, verse afectada por otros medicamentos (ver Precauciones, Interacciones farmacológicas). La N-desmetilación de hidrocodona para formar norhidrocodona a través del CYP3A4 durante la O-desmetilación de hidrocodona a hidromorfona es predominantemente catalizada por el CYP2D6 y, en menor grado, por una enzima CYP desconocida de baja afinidad desconocida. La hidrocodona y sus metabolitos se eliminan principalmente en los riñones.

Acetaminofén: El acetaminofén se absorbe rápidamente del tracto gastrointestinal y se distribuye a la mayoría de los tejidos corporales. Una pequeña fracción (10 a 25%) de acetaminofén está unida a las proteínas plasmáticas. La vida media plasmática es de 1.25 a 3 horas, pero puede incrementarse por daño hepático y después de una sobredosis. La eliminación del acetaminofén es principalmente por metabolismo hepático (conjugación) y subsecuente excreción renal de los metabolitos. El acetaminofén se metaboliza principalmente en el hígado mediante cinética de primer orden e implica tres vías principales separadas: conjugación con glucurónido; conjugación con sulfato; y la oxidación a través de la vía de la enzima oxidasa de función mixta dependiente de P450, del citocromo, para formar un metabolito intermedio reactivo, que se conjuga con glutatión y luego se metaboliza adicionalmente para formar conjugados de cisteína y ácido mercaptúrico. La principal isoenzima del citocromo P450 involucrada parece ser CYP2E1, con CYP1A2 y CYP3A4 como vías adicionales. Aproximadamente el 85% de una dosis oral aparece en la orina en las 24 horas siguientes a la administración, la mayoría como conjugado glucurónido, con pequeñas cantidades de otros conjugados y medicamento sin cambio. Ver Sobredosis para información de toxicidad.


FARMACODINAMIA:

Efectos en el sistema nervioso central: La analgesia es la principal acción terapéutica de la hidrocodona. La hidrocodona produce depresión respiratoria por acción directa sobre los centros respiratorios del tronco encefálico. La depresión respiratoria implica una reducción en la capacidad de respuesta de los centros respiratorios del tronco encefálico tanto en los aumentos de la tensión del dióxido de carbono como en la estimulación eléctrica.

La hidrocodona causa miosis, incluso en la oscuridad total. Las pupilas pun.pngormes son un signo de sobredosis de opiáceos pero no son patognomónicas (por ejemplo, lesiones pontinas de origen hemorrágico o isquémico pueden producir hallazgos similares). Se puede observar midriasis marcada en lugar de miosis debido a hipoxia en situaciones de sobredosis.

Las dosis terapéuticas de acetaminofén tienen efectos insignificantes sobre los sistemas cardiovascular o respiratorio; sin embargo, dosis tóxicas pueden causar insuficiencia circulatoria y respiración rápida y superficial.

Efectos sobre el tracto gastrointestinal y otro músculo liso: La hidrocodona causa una reducción en la motilidad asociada a un aumento del tono del músculo liso en el antro del estómago y el duodeno. Se retrasa la digestión de los alimentos en el intestino delgado y se reducen las contracciones propulsivas. Se reducen las ondas peristálticas propulsivas en el colon, mientras que el tono puede aumentar hasta el punto de espasmo, lo que resulta en estreñimiento. Otros efectos inducidos por los opiáceos pueden incluir una reducción de las secreciones biliares y pancreáticas, espasmo del esfínter de Oddi y elevaciones transitorias en la amilasa sérica.

Efectos sobre el sistema cardiovascular: La hidrocodona produce vasodilatación periférica que puede resultar en hipotensión ortostática o síncope. Las manifestaciones de liberación de histamina y/o vasodilatación periférica pueden incluir prurito, enrojecimiento, ojos rojos, sudoración y/o hipotensión ortostática.

Efectos en el sistema endocrino: Los opiáceos inhiben la secreción de la hormona adrenocorticotrópica (ACTH), el cortisol y la hormona luteinizante (LH) en humanos (ver Reacciones adversas). También estimulan la prolactina, la secreción de hormona del crecimiento (GH) y la secreción pancreática de insulina y glucagón.

El uso crónico de opiáceos puede influir en el eje hipotálamo-pituitario-gonadal, lo que conduce a la deficiencia de andrógenos que puede manifestarse como síntomas como baja libido, impotencia, disfunción eréctil, amenorrea o infertilidad. Se desconoce el papel causal de los opiáceos en el síndrome de hipogonadismo debido a que los diversos factores de estrés médicos, físicos, de estilo de vida y psicológicos que pueden influir en los niveles hormonales gonadales no se han controlado adecuadamente en los estudios realizados hasta la fecha (ver Reacciones adversas).

Efectos en el sistema inmune: Se ha demostrado que los opiáceos tienen una variedad de efectos sobre los componentes del sistema inmune. Se desconoce la importancia clínica de estos hallazgos. En general, los efectos de los opiáceos parecen ser modestamente inmunosupresores.

Relación concentración-eficacia: La concentración analgésica efectiva mínima variará ampliamente entre los pacientes, especialmente entre aquellos que han sido tratados previamente con opiáceos agonistas potentes. La concentración analgésica mínima efectiva de hidrocodona para cualquier paciente individual puede aumentar con el tiempo debido a un aumento en el dolor, al desarrollo de un nuevo síndrome de dolor o al desarrollo de tolerancia analgésica (ver Dosificación y administración).

Relación reacciones adversas-concentración: Existe una relación entre el aumento de la concentración plasmática de la hidrocodona y el aumento de la frecuencia de reacciones adversas a opiáceos relacionadas con la dosis, tales como náuseas, vómitos, efectos sobre el SNC y depresión respiratoria. En pacientes tolerantes a los opiáceos, la situación puede verse alterada por el desarrollo de tolerancia a las reacciones adversas relacionadas con los opiáceos (ver Dosificación y administración).

CONTRAINDICACIONES Y ADVERTENCIAS:

Contraindicaciones: Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén se contraindican en pacientes con las siguientes condiciones:

• Depresión respiratoria clínicamente significativa (ver Advertencias).

• Asma bronquial aguda o grave en un escenario sin supervisión o en ausencia de un equipo de resucitación (ver Advertencias).

• Obstrucción gastrointestinal conocida o sospechada, incluido íleo paralítico (ver Advertencias).

• Hipersensibilidad a la hidrocodona o al acetaminofén (por ejemplo, anafilaxia). Los pacientes que se conocen como hipersensibles a otros opioides pueden exhibir sensibilidad cruzada a la Hidrocodona (ver Advertencias y Reacciones adversas).

Advertencias:

Adicción, abuso y uso indebido: Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén contienen hidrocodona, una sustancia controlada dentro del listado de sustancias fiscalizadas en Colombia. Como opiáceo, las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén exponen a los usuarios a los riesgos de adicción, abuso y uso indebido (ver Abuso del medicamento y dependencia).

Aunque el riesgo de adicción para cualquier individuo es desconocido, este puede ocurrir en pacientes adecuadamente prescritos con tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén. La adicción puede ocurrir a dosis recomendadas y cuando se abusa o se hace un uso indebido del medicamento.

Evalúe el riesgo de cada paciente a la adicción a los opiáceos, abuso o uso indebido antes de prescribir tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, y monitoree todos los pacientes que reciben tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén para detectar señales de estos comportamientos y condiciones. Los riesgos aumentan en pacientes con antecedentes personales o familiares de abuso de sustancias (incluyendo abuso o adicción a drogas o alcohol) o enfermedad mental (por ejemplo, depresión mayor). Sin embargo, el potencial de estos riesgos no debe impedir el manejo adecuado del dolor en ningún paciente. Los pacientes con mayor riesgo pueden ser prescritos con opiáceos como las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, pero el uso en estos pacientes requiere un asesoramiento intensivo sobre los riesgos y el uso adecuado de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén junto con un seguimiento intensivo en cuanto a signos de adicción, abuso y uso indebido.

Los opiáceos son buscados por toxicómanos y personas con trastornos de adicción y están sujetos a desviación criminal. Tenga en cuenta estos riesgos cuando prescriba o dispense tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén. Las estrategias para reducir estos riesgos incluyen la prescripción del medicamento en la cantidad más pequeña necesaria y el asesoramiento al paciente sobre la eliminación adecuada del medicamento no utilizado (ver Precauciones, Información para los pacientes).

Depresión respiratoria potencialmente mortal: Se ha informado depresión respiratoria seria, potencialmente mortal o fatal con el uso de opiáceos, incluso cuando se usan según las recomendaciones. La depresión respiratoria, si no se reconoce y trata de inmediato, puede provocar un paro respiratorio y la muerte. El manejo de la depresión respiratoria puede incluir observación rigurosa, medidas de apoyo y uso de antagonistas de opiáceos, dependiendo del estado clínico del paciente (ver Sobredosis). La retención de dióxido de carbono (CO2) de la depresión respiratoria inducida por opiáceos puede exacerbar los efectos sedantes de los opiáceos.

Si bien puede ocurrir depresión respiratoria seria, potencialmente mortal o fatal en cualquier momento durante el uso de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, el riesgo es mayor durante el inicio de la terapia o después de un aumento de la dosis. Monitoree a los pacientes de cerca para detectar depresión respiratoria, especialmente en las primeras 24 a 72 horas de iniciar la terapia y después de los aumentos de dosis de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén.

Para reducir el riesgo de depresión respiratoria, es esencial una apropiada dosificación y titulación de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén (ver Dosificación y administración). La sobrevaloración de la posología de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén en la transferencia de pacientes de otro producto opiáceo puede dar como resultado una sobredosis mortal.

La ingesta accidental de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, especialmente por niños, puede resultar en depresión respiratoria y muerte debido a una sobredosis de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén.

Síndrome de abstinencia de opiáceos en neonatos: El uso prolongado de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén durante el embarazo puede resultar en abstinencia en el recién nacido. El síndrome de abstinencia de opiáceos en neonatos, a diferencia del síndrome de abstinencia de opiáceos en adultos, puede ser potencialmente mortal si no se reconoce y trata, y requiere tratamiento según protocolos desarrollados por expertos en neonatología. Observe a los recién nacidos para detectar signos de síndrome de abstinencia de opiáceos en neonatos y maneje en consecuencia. Informe a las mujeres embarazadas que usan opiáceos durante un periodo prolongado del riesgo de síndrome de abstinencia de opiáceos en neonatos y asegúrese de que el tratamiento adecuado estará disponible (ver Precauciones, Información para los pacientes y Embarazo).

Riesgos del uso concomitante o suspensión de los inhibidores e inductores del citocromo P450 3A4: El uso concomitante de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén con un inhibidor del CYP3A4, como antibióticos macrólidos (por ejemplo, eritromicina), agentes antimicóticos azólicos (por ejemplo, ketoconazol) e inhibidores de proteasa (por ejemplo, ritonavir), puede aumentar las concentraciones plasmáticas de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén y prolongar las reacciones adversas a los opiáceos, lo que puede causar depresión respiratoria potencialmente fatal (ver Advertencias), particularmente cuando se añade un inhibidor después de que se haya alcanzado una dosis estable de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén. Asimismo, la suspensión de un inductor del CYP3A4, como la rifampicina, la carbamacepina y la fentoina, en pacientes tratados con tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén puede aumentar las concentraciones plasmáticas de la hidrocodona y prolongar las reacciones adversas a los opiáceos. Cuando se añadan inhibidores del CYP3A4 o se interrumpan inductores del CYP3A4 en pacientes tratados con tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, se debe hacer seguimiento a los pacientes a intervalos frecuentes y considerar la reducción de la dosis de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén hasta que se alcancen los efectos estables del medicamento en cuanto a eficacia y tolerabilidad (ver Precauciones, Interacciones farmacológicas).

El uso concomitante de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén con inductores del CYP3A4 o la suspensión de un inhibidor del CYP3A4 podría disminuir las concentraciones plasmáticas de hidrocodona, disminuir la eficacia del opiáceo o, posiblemente, llevar a un síndrome de abstinencia en un paciente que había desarrollado dependencia física a hidrocodona. Cuando se utilicen las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén con inductores del CYP3A4 o se suspendan los inhibidores del CYP3A4, haga seguimiento a los pacientes a intervalos frecuentes y considere aumentar la dosis de opiáceos si es necesario para mantener una analgesia adecuada o si se presentan síntomas de abstinencia de opiáceos (ver Precauciones, Interacciones farmacológicas).

Riesgos de uso concomitante con benzodiacepinas u otros depresores del SNC: La sedación profunda, depresión respiratoria, coma y muerte pueden resultar del uso concomitante de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén con benzodiacepinas u otros depresores del SNC (por ejemplo, sedantes/hipnóticos no benzodiacepínicos, ansiolíticos, tranquilizantes, relajantes musculares, anestésicos generales, antipsicóticos, otros opiáceos, alcohol). Debido a estos riesgos, reserve la prescripción concomitante de estos medicamentos para uso en pacientes para los cuales las opciones alternativas de tratamiento son inadecuadas.

Estudios observacionales han demostrado que el uso concomitante de analgésicos opiáceos y benzodiacepinas aumenta el riesgo de mortalidad relacionada con el medicamento en comparación con el uso de analgésicos opiáceos solos. Debido a propiedades farmacológicas similares, es razonable esperar un riesgo similar con el uso concomitante de otros medicamentos depresores del SNC con analgésicos opiáceos (ver Precauciones, Interacciones farmacológicas).

Si se decide prescribir una benzodiacepina u otro depresor del SNC de forma concomitante con un analgésico opiáceo, prescriba las dosis efectivas más bajas y duraciones mínimas de uso concomitante. En pacientes que ya reciben un analgésico opiáceo, prescriba una dosis inicial más baja de la benzodiacepina u otro depresor del SNC que lo indicado en la ausencia de un opiáceo, y ajuste la dosis con base en la respuesta clínica. Si se inicia un analgésico opiáceo en un paciente que ya está tomando una benzodiacepina o de otro depresor del SNC, prescriba una dosis inicial más baja del analgésico opiáceo y ajuste la dosis con base en la respuesta clínica. Haga seguimiento de cerca a los pacientes para detectar signos y síntomas de depresión respiratoria y sedación.

Asesore a los pacientes y a los cuidadores sobre los riesgos de depresión respiratoria y sedación cuando se utilizan las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén con benzodiacepinas u otros depresores del SNC (incluyendo alcohol y drogas ilícitas). Aconseje a los pacientes que no conduzcan ni operen maquinaria pesada hasta que se hayan determinado los efectos del uso concomitante de la benzodiacepina u otro depresor del SNC. Evalúe a los pacientes para detectar riesgos de trastornos por uso de sustancias, incluyendo el abuso y el uso indebido de opiáceos, y adviértales del riesgo de sobredosis y muerte asociadas con el uso de depresores del SNC adicionales, incluyendo el alcohol y las drogas ilícitas (ver Precauciones, Interacciones farmacológicas e Información para los pacientes).

Depresión respiratoria potencialmente mortal en pacientes con enfermedad pulmonar crónica o en pacientes ancianos, caquécticos o debilitados: El uso de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén está contraindicado en pacientes con asma bronquial aguda o severa en un entorno sin seguimiento monitoreo o en ausencia de equipo de reanimación.

Pacientes con enfermedad pulmonar crónica: Los pacientes tratados con tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén que presentan enfermedad pulmonar obstructiva crónica significativa o cor pulmonale, y aquellos con una reserva respiratoria substancialmente disminuida, hipoxia, hipercapnia o depresión respiratoria preexistente tienen mayor riesgo de disminución del impulso respiratorio, incluso a las dosis recomendadas de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén (ver Advertencias, Depresión respiratoria potencialmente mortal).

Pacientes ancianos, caquécticos o debilitados: Es más probable que ocurra depresión respiratoria potencialmente mortal en pacientes ancianos, caquécticos o debilitados, ya que pueden tener una farmacocinética alterada o una depuración alterada en comparación con pacientes más jóvenes y sanos (ver Advertencias, Depresión respiratoria potencialmente mortal).

Supervise a estos pacientes de cerca, particularmente al iniciar y titular la dosis de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén y cuando estas se administren concomitantemente con otros medicamentos que depriman la respiración (ver Advertencias, Depresión respiratoria potencialmente). Alternativamente, considere el uso de analgésicos no opiáceos en estos pacientes.

Insuficiencia suprarrenal: Se han reportado casos de insuficiencia suprarrenal con el uso de opiáceos, usualmente después de un mes de uso. La presentación de la insuficiencia suprarrenal puede incluir síntomas no específicos y signos que incluyen náuseas, vómitos, anorexia, fatiga, debilidad, mareos y presión arterial baja. Si se sospecha insuficiencia suprarrenal, confirme el diagnóstico con pruebas diagnósticas lo antes posible. Si se diagnostica insuficiencia suprarrenal, trate con dosis fisiológicas de reemplazo de corticoesteroides. Retire al paciente del opiáceo para permitir que la función suprarrenal se recupere y continúe el tratamiento con corticoesteroides hasta que la función suprarrenal se recupere. Se pueden probar otros opiáceos, ya que algunos casos reportaron el uso de un opiáceo diferente sin recurrencia de insuficiencia suprarrenal. La información disponible no iden.pngica ningún opiáceo en particular como más probable que esté asociado con la insuficiencia suprarrenal.

Hipotensión severa: Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén pueden causar hipotensión severa, incluso hipotensión ortostática y síncope en pacientes ambulatorios. Existe mayor riesgo en pacientes cuya capacidad para mantener la presión sanguínea ya ha sido comprometida por un volumen sanguíneo reducido o la administración concomitante de ciertos fármacos depresores del SNC (por ejemplo, fenotiazinas o anestésicos generales) (ver Precauciones, Interacciones farmacológicas). Haga seguimiento a estos pacientes para detectar signos de hipotensión después de iniciar o ajustar la dosificación de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén. En pacientes con shock circulatorio, las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén pueden causar vasodilatación que puede reducir aún más el gasto cardíaco y la presión arterial. Evite el uso de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén en pacientes con shock circulatorio.

Hepatotoxicidad: El acetaminofén se ha asociado con casos de falla hepática aguda, algunas veces resultando en trasplante de hígado y muerte. La mayoría de los casos de daño hepático se asocian con el uso de acetaminofén en dosis que exceden los 4000 mg por día, y frecuentemente involucran más de un producto que contiene acetaminofén. La ingesta excesiva de acetaminofén puede ser intencional para auto infligirse daño o no intencional ya que los pacientes intentan obtener mayor alivio del dolor o, sin saberlo, toman otros productos que contienen acetaminofén.

El riesgo de falla hepática aguda es mayor en individuos con enfermedad hepática subyacente y en individuos que ingieren alcohol mientras toman Acetaminofén.

Instruya a los pacientes a buscar Acetaminofén o APAP en las etiquetas de los envases y a no utilizar más de un producto que contenga acetaminofén. Indique a los pacientes que deben buscar atención médica inmediatamente después de la ingesta de más de 4000 mg de acetaminofén por día, aún si se sienten bien.

Reacciones cutáneas serias: De forma rara, el acetaminofén puede causar reacciones cutáneas graves, tales como pustulosis exantemática aguda generalizada (AGEP), Síndrome de Stevens-Johnson (SJS) y necrólisis epidérmica tóxica (TEN), las cuales pueden ser fatales. Se debe informar a los pacientes acerca de los signos de las reacciones cutáneas graves, y se debe suspender el uso del medicamento a la primera aparición de sarpullido de la piel o cualquier otro signo de hipersensibilidad.

Hipersensibilidad/Anafilaxia: Se han presentado reportes post mercadeo de hipersensibilidad y anafilaxia asociados con el uso de acetaminofén. Los signos clínicos incluyeron inflamación de la cara, boca y garganta, dificultad respiratoria, urticaria, rash, prurito y vómito. Los reportes de anafilaxia potencialmente mortal que requiere atención médica de emergencia son poco frecuentes. Indique a los pacientes que deben suspender inmediatamente las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén y buscar atención médica si experimentan estos síntomas. No prescriba tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén a pacientes con alergia al acetaminofén (ver Precauciones, Información para los pacientes).

Riesgos de uso en pacientes con aumento de la presión intracraneal, tumores cerebrales, lesión craneana o deterioro de la conciencia: En pacientes que pueden ser susceptibles a los efectos intracraneales de retención de CO2 (por ejemplo, aquellos con evidencia de aumento de la presión intracraneal o tumores cerebrales), las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén pueden reducir el impulso respiratorio, y la retención de CO2 resultante puede aumentar la presión intracraneal. Haga seguimiento a estos pacientes para detectar signos de sedación y depresión respiratoria, particularmente al iniciar el tratamiento con tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén.

Los opiáceos también pueden enmascarar el curso clínico en un paciente con una lesión en la cabeza. Evite el uso de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén en pacientes con disminución de la conciencia o coma.

Riesgos de uso en pacientes con afecciones condiciones gastrointestinales: Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén están contraindicadas en pacientes con obstrucción gastrointestinal, incluyendo el íleo paralítico.

La administración de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén u otros opiáceos puede enmascarar el diagnóstico o el curso clínico en pacientes con condiciones abdominales agudas.

La hidrocodona puede causar espasmo del esfínter de Oddi. Los opiáceos pueden causar aumentos en la amilasa sérica. Vigile a los pacientes con enfermedad de las vías biliares, incluyendo pancreatitis aguda, para detectar signos de empeoramiento de su condición.

Riesgo incrementado de convulsiones en pacientes con trastornos convulsivos: Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén pueden aumentar la frecuencia de las convulsiones en pacientes con trastornos convulsivos y puede aumentar el riesgo de convulsiones que ocurren en otros escenarios clínicos asociados con convulsiones. Haga seguimiento a los pacientes con antecedentes de trastornos convulsivos para controlar signos de empeoramiento durante el tratamiento con tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén.

Abstinencia: Evite el uso de analgésicos agonistas/antagonistas mixtos (por ejemplo, pentazocina, nalbufina y butorfanol) o agonistas parciales (por ejemplo, buprenorfina) en pacientes que reciben un analgésico opiáceo agonista completo, incluyendo tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén. En estos pacientes, los analgésicos agonistas/antagonistas mixtos y parciales pueden reducir el efecto analgésico y/o precipitar síntomas de abstinencia.

Al interrumpir la administración de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, disminuya gradualmente la dosificación (ver Dosificaicón y administración). No suspenda repentinamente las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén (ver Abuso y dependencia del medicamento) en pacientes que han estado usando tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén durante todo el día por más de 5 días.

EMBARAZO:

Efectos teratogénicos: Embarazo categoría C - No hay ningún estudio adecuado y bien controlado en mujeres embarazadas. Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén deben utilizarse durante el embarazo solamente si el beneficio potencial jus.pngica el riesgo potencial para el feto.

Efectos no teratogénicos:

Reacciones adversas fetales/neonatales: El uso prolongado de analgésicos opiáceos durante el embarazo con fines médicos o no médicos puede dar lugar al síndrome de dependencia física en neonatos y síndrome de abstinencia de opiáceos en neonatos poco después del nacimiento.

El síndrome de abstinencia de opiáceos en neonatos se presenta como irritabilidad, hiperactividad, patrón de sueño anormal, llanto agudo, temblor, vómitos, diarrea y falta de aumento de peso. El inicio, la duración y la gravedad del síndrome de abstinencia de opiáceos en neonatos varían según el opiáceo específico utilizado, la duración del uso, el momento y la cantidad del último uso materno y la tasa de eliminación del medicamento por el recién nacido. Observe a los recién nacidos para detectar síntomas del síndrome de abstinencia de opiáceos en neonatos y controle en consecuencia (ver Advertencias).

Trabajo de parto y parto: Los opiáceos atraviesan la placenta y pueden producir depresión respiratoria y efectos psicofisiológicos en neonatos. Un antagonista opiáceo, como la naloxona, debe estar disponible para la reversión de la depresión respiratoria inducida por opiáceos en el recién nacido. El uso de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén no se recomienda en mujeres embarazadas, durante o inmediatamente antes del parto, cuando otras técnicas analgésicas son más apropiadas. Los analgésicos opiáceos, incluyendo las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, pueden prolongar el trabajo de parto mediante acciones que reducen temporalmente la fuerza, duración y frecuencia de las contracciones uterinas. Sin embargo, este efecto no es consistente y puede ser compensado por una mayor tasa de dilatación cervical, que tiende a acortar el trabajo de parto. Monitoree a los neonatos expuestos a analgésicos opiáceos durante el trabajo de parto para detectar signos de sedación excesiva y depresión respiratoria.


MADRES LACTANTES: La hidrocodona está presente en la leche materna.

Los beneficios de la lactancia materna para el desarrollo y la salud deben ser considerados junto con la necesidad clínica de la madre de usar tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, así como cualquier efecto adverso potencial en el lactante debido al uso de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén o en la condición materna subyacente.

Se debe monitorear a los lactantes expuestos a las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén a través de la leche materna para detectar exceso de sedación y depresión respiratoria. Los síntomas de abstinencia pueden ocurrir en los lactantes cuando se detiene la administración materna de un analgésico opiáceo o cuando se detiene la lactancia materna.

Uso pediátrico: La seguridad y efectividad de las tabletas de bitartrato de hidrocodona en la población pediátrica no ha sido establecida.

Uso geriátrico: Los pacientes ancianos (de 65 años o más) pueden tener mayor sensibilidad a las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén. En general, tenga cuidado al seleccionar una dosificación para un paciente anciano, generalmente iniciando en el extremo inferior del rango de dosificación, reflejando la mayor frecuencia de disminución de la función hepática, renal o cardíaca y de la enfermedad concomitante u otro tratamiento farmacológico.

La depresión respiratoria es el principal riesgo para los pacientes ancianos tratados con opiáceos, y esta ha ocurrido después de administración de grandes dosis iniciales a pacientes que no toleran los opiáceos o cuando los opiáceos son administrados conjuntamente con otros agentes que deprimen la respiración. Titule la dosis de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén lentamente en pacientes geriátricos y monitoree de cerca para detectar signos de depresión del sistema nervioso central y depresión respiratoria (ver Advertencias).

Se sabe que la hidrocodona y el acetaminofén son excretados de manera importante por el riñón, así que el riesgo de reacciones adversas a este medicamento puede ser mayor en pacientes con insuficiencia renal. Debido a que los pacientes ancianos son más propensos a tener una función renal disminuida, se debe tener cuidado en la selección de dosis, siendo útil el monitoreo de la función renal.

Insuficiencia hepática: Los pacientes con insuficiencia hepática pueden tener mayores concentraciones plasmáticas de hidrocodona que aquellos con función normal. Use una dosis inicial baja de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén en pacientes con insuficiencia hepática y monitoree para detectar eventos adversos como depresión respiratoria y sedación.

Insuficiencia renal: Los pacientes con insuficiencia renal pueden tener mayores concentraciones plasmáticas de hidrocodona que aquellos con función normal. Use una dosis inicial baja de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén en pacientes con insuficiencia renal y monitoree para detectar eventos adversos como depresión respiratoria y sedación.

REACCIONES ADVERSAS: Las siguientes reacciones adversas se han iden.pngicado durante el uso posterior a la aprobación de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén. Debido a que estás reacciones se reportaron voluntariamente por una población de tamaño incierto, no siempre es posible estimar con fiabilidad su frecuencia o establecer una relación causal con la exposición al medicamento.

Las reacciones adversas reportadas más frecuentemente son aturdimiento, mareos, sedación, náuseas y vómitos.

Otras reacciones adversas incluyen:

Sistema nervioso central - Somnolencia, confusión, letargo, deterioro del desempeño mental y físico, ansiedad, miedo, disforia, dependencia psicológica, cambios de humor.

Sistema gastrointestinal - Estreñimiento.

Sistema genitourinario - Espasmo uretral, espasmos de esfínteres vesicales y retención urinaria.

Sentidos especiales - Se han reportado casos de deterioro auditivo o pérdida permanente de la predominantemente en pacientes con sobredosis crónica.

Dermatológicas - Erupción cutánea, prurito, síndrome de Stevens-Johnson, necrólisis epidérmica tóxica, reacciones alérgicas.

Hematológicas - Trombocitopenia, agranulocitosis.

Síndrome serotoninérgico: Se han reportado casos de síndrome serotoninérgico, una condición potencialmente mortal, durante el uso concomitante de opiáceos con fármacos serotoninérgicos.

Insuficiencia suprarrenal: Se han reportado casos de insuficiencia suprarrenal con el uso de opiáceos, usualmente después de un mes de uso.

Anafilaxia: Se ha reportado anafilaxia con los ingredientes contenidos en las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén.

Deficiencia de andrógenos: Se han presentado casos de deficiencia de andrógenos con el uso crónico de opiáceos (ver Farmacología clínica).

CONDUCIR U OPERAR MAQUINARIA PESADA: Informe a los pacientes que las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén pueden alterar la capacidad de realizar actividades potencialmente peligrosas, como conducir un automóvil u operar maquinaria pesada. Recomiende a los pacientes que no realicen tales tareas hasta que sepan cómo reaccionarán a la medicación (ver Advertencias).

Estreñimiento: Informe a los pacientes acerca del potencial de estreñimiento severo, incluyendo instrucciones de manejo y cuándo buscar atención médica (ver Reacciones adversas y Farmacología clínica).

Disposición de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén no utilizadas. Aconseje a los pacientes que desechen de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén sin usar botándolas por el excusado.

Pruebas de laboratorio: En pacientes con enfermedad renal o hepática severa los efectos de la terapia deben monitorearse con pruebas en serie de control de la función renal y/o hepática.

INTERACCIONES FARMACOLÓGICAS:

Inhibidores del CYP3A4 y CYP2D6: El uso concomitante de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén con inhibidores del CYP3A4, tales como antibióticos macrólidos (por ejemplo, eritromicina), agentes antimicóticos azólicos (por ejemplo, ketoconazol) e inhibidores de la proteasa (por ejemplo, ritonavir) pueden incrementar la concentración plasmática de la hidrocodona en las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, lo que puede resultar en un aumento o prolongación de los efectos opiáceos. Estos efectos pueden ser más pronunciados con el uso concomitante de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén con inhibidores de CYP3A4 y CYP2D6, particularmente cuando se agrega un inhibidor después de que se alcanza una dosis estable de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén (ver Advertencias).

Después de interrumpir un inhibidor del CYP3A4, a medida que disminuyen los efectos del inhibidor, la concentración plasmática de la hidrocodona disminuirá (ver Farmacología clínica), lo que resultará en una disminución de la eficacia de los opiáceos o un síndrome de abstinencia en pacientes que han desarrollado dependencia física a las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén.

Si es necesario el uso concomitante, considere la reducción de la dosis de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén hasta que se consigan los efectos estables del medicamento. Monitoree a los pacientes para detectar signos de depresión respiratoria y sedación a intervalos frecuentes. Si se interrumpe un inhibidor del CYP3A4, considere aumentar la dosis de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén hasta que se consigan los efectos estables del medicamento. Haga seguimiento para detectar signos o síntomas de abstinencia de opiáceos.

Inductores de CYP3A4: El uso concomitante de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén e inductores de CYP3A4, como la rifampicina, la carbamazepina y la fenitoína, puede disminuir la concentración plasmática de la hidrocodona (ver Farmacología clínica), lo que resulta en una disminución de la eficacia o el inicio del síndrome de abstinencia en pacientes que han desarrollado dependencia física a la hidrocodona (ver Advertencias).

Después de interrumpir un inductor de CYP3A4, a medida que disminuyen los efectos del inductor, la concentración plasmática de la hidrocodona aumentará (ver Farmacología clínica), lo que podría aumentar o prolongar tanto los efectos terapéuticos como las reacciones adversas, y puede causar depresión respiratoria grave.

Si el uso concomitante es necesario, considere aumentar la dosis de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén hasta que se consigan los efectos estables del medicamento. Monitoree al paciente para detectar signos y síntomas de abstinencia de opiáceos. Si se interrumpe un inductor del CYP3A4, considere la reducción de la dosis de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén y monitoree para detectar signos de depresión respiratoria.

Benzodiacepinas y otros depresores del SNC: Debido al efecto farmacológico aditivo, el uso concomitante de las benzodiacepinas y otros depresores del SNC, como las benzodiacepinas y otros sedantes hipnóticos, ansiolíticos y calmantes, relajantes musculares, anestésicos generales, antipsicóticos y otros opiáceos, incluyendo alcohol, aumenta el riesgo de hipotensión, depresión respiratoria, sedación profunda, coma y muerte.

Reserve la prescripción concomitante de estos medicamentos para uso en pacientes para quienes las opciones alternativas de tratamiento son inadecuadas. Limite las dosis y duraciones al mínimo requerido. Monitoree a los pacientes para detectar signos de depresión respiratoria y sedación (ver Precauciones).

Medicamentos serotoninérgicos: El uso concomitante de opiáceos con otros medicamentos que afectan el sistema neurotransmisor serotoninérgico, tales como Inhibidores Selectivos de la Recaptación de Serotonina (ISRS), Inhibidores de la Recaptación de Serotonina y Norepinefrina (IRSN), antidepresivos tricíclicos (ATC), triptanos, antagonistas del receptor 5-HT3, medicamentos que afectan el sistema de neurotransmisores de serotonina (por ejemplo, mirtazapina, trazodona, tramadol) y los inhibidores de la monoamino oxidasa (MAO) (previstos para tratar trastornos psiquiátricos y también otros, como el linezolid y el azul de metileno por vía intravenosa), ha resultado en síndrome serotoninérgico (ver Precauciones, Información para pacientes).

Si se jus.pngica el uso concomitante, monitoree cuidadosamente al paciente, particularmente durante el inicio del tratamiento y el ajuste de la dosis. Suspenda las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén si se sospecha síndrome serotoninérgico.

Inhibidores de la monoamina oxidasa (MAOI): El uso concomitante de opiáceos y de MAOI, como la fenelzina, la tranilcipromina o el linezolid, puede manifestarse como síndrome serotoninérgico o toxicidad opiácea (por ejemplo, depresión respiratoria, coma) (ver Advertencias).

El uso de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén no está recomendado en pacientes que toman MAOI o en los 14 días siguientes a la interrupción de dicho tratamiento.

Si es necesario el uso urgente de un opiáceo, use dosis de prueba y titulación frecuente de pequeñas dosis para tratar el dolor mientras se observa de cerca de la presión arterial y los signos y síntomas de depresión del SNC y respiratorio.

Combinación de analgésicos opiáceos agonistas/antagonistas mixtos y agonistas parciales: El uso concomitante de opiáceos con otros analgésicos opiáceos, como el butorfanol, la nalbufina y la pentazocina, puede reducir el efecto analgésico de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén y/o precipitar los síntomas de abstinencia.

Aconseje al paciente evitar el uso concomitante de estos medicamentos.

Relajantes musculares: Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén pueden mejorar la acción de bloqueo neuromuscular de los relajantes del músculo esquelético y producir un mayor grado de depresión respiratoria.

Si está jus.pngicado el uso concomitante, monitoree los pacientes para detectar signos de depresión respiratoria que puedan ser mayores de lo esperado y disminuya la dosis de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén y/o el relajante muscular, según sea necesario.

Diuréticos: Los opiáceos pueden reducir la eficacia de los diuréticos induciendo la liberación de la hormona antidiurética.

Si se jus.pngica el uso concomitante, supervise a los pacientes para detectar signos de disminución de la diuresis y/o efectos sobre la presión arterial y aumente la dosis del diurético, según sea necesario.

Medicamentos anticolinérgicos: El uso concomitante de medicamentos anticolinérgicos puede aumentar el riesgo de retención urinaria y/o estreñimiento severo, lo que puede dar lugar a íleo paralítico.

Si se jus.pngica el uso concomitante, monitoree a los pacientes para detectar signos y síntomas de retención urinaria o de motilidad gástrica reducida cuando las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén se usan de forma concomitante con medicamentos anticolinérgicos.

Interacciones medicamento/prueba de laboratorio: El acetaminofén puede producir resultados de ensayos falsos positivos para el ácido 5- hidroxiindolacetico urinario.

FARMACOLOGÍA CLÍNICA:

Mecanismo de acción: La hidrocodona es un agonista opiáceo completo con una selectividad relativa por el receptor opiáceo mu (µ), aunque puede interactuar con otros receptores opiáceos en dosis más altas. La principal acción terapéutica de la hidrocodona es la analgesia. Al igual que todos los agonistas opiáceos completos, no hay efecto techo para la analgesia con hidrocodona. Clínicamente la dosis es titulada para proporcionar una analgesia adecuada y puede estar limitada por reacciones adversas, incluyendo depresión respiratoria y del SNC.

Se desconoce el mecanismo preciso de la acción analgésica. Sin embargo, se han iden.pngicado receptores opiáceos del SNC específicos para compuestos endógenos con actividad similar a los opiáceos en todo el cerebro y la médula espinal y se cree que desempeñan un papel en los efectos analgésicos de este medicamento. La acción analgésica del acetaminofén implica mecanismos de acción periféricos, pero el mecanismo específico está aún por determinarse. La actividad antipirética es mediada a través de los centros reguladores del calor localizados en el hipotálamo. El acetaminofén inhibe la prostaglandina sintetasa. Las dosis terapéuticas de acetaminofén tiene efectos insignificantes sobre los sistemas cardiovascular o respiratorio; sin embargo, las dosis tóxicas pueden causar falla circulatoria y respiración rápida, superficial.

ADVERTENCIAS: Adicción, abuso y uso indebido; depresión respiratoria potencialmente mortal; ingestión accidental; síndrome de abstinencia de opiáceos en neonatos; interacción con el citocromo p450 3a4; hepatotoxicidad; y riesgos del uso concomitante con benzodiacepinas u otros depresores del SNC.

Adicción, abuso y uso indebido: Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén exponen a pacientes y otros usuarios al riesgo de adicción a opiáceos, abuso y uso indebido que puede llevar a sobredosis y muerte. Evalúe el riesgo de cada paciente antes de prescribir tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, y haga seguimiento frecuente a todos los pacientes para detectar el desarrollo de estos comportamientos y condiciones (ver Advertencias).

Depresión respiratoria potencialmente mortal: Puede ocurrir una depresión respiratoria seria, potencialmente mortal o fatal por el uso de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén. Monitoree para detectar depresión respiratoria, sobre todo durante el inicio del tratamiento con tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén o posterior a un incremento en la dosis (ver Advertencias).

Ingestión accidental: La ingestión accidental de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, sobre todo en el caso de niños, puede resultar en una sobredosis fatal del principio activo (ver Advertencias).

Síndrome de abstinencia de opiáceos en neonatos: El uso prolongado de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén durante el embarazo puede resultar en síndrome de abstinencia de opiáceos en neonatos, el cual puede ser potencialmente mortal en caso de no reconocerlo y tratarlo, y requiere un manejo especial según los protocolos desarrollados por expertos en neonatología. Si el uso del opiáceo se requiere por un periodo prolongado en una mujer embarazada, infórmele a la paciente sobre el riesgo de síndrome de abstinencia de opiáceos en neonatos y asegúrese de que el tratamiento adecuado estará disponible (ver Advertencias).

Interacción con el citocromo P450 3A4: El uso concomitante de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén con todos los inhibidores de citocromo P450 3A4 puede resultar en el incremento de concentraciones plasmáticas de hidrocodona, lo que puede incrementar o prolongar reacciones adversas y causar depresión respiratoria potencialmente fatal. Adicionalmente, la suspensión de un inductor del citocromo P450 3A4 utilizado de manera concomitante puede generar un aumento en las concentraciones plasmáticas de hidrocodona. Supervise a los pacientes que reciben tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén y cualquier inhibidor o inductor del citocromo P450 3A4 para detectar signos de depresión respiratoria o sedación (ver Farmacología clínica; Advertencias y Precauciones, Interacciones farmacológicas).

Hepatotoxicidad: El acetaminofén se ha asociado con casos de falla hepática aguda, algunas veces resultando en trasplante de hígado y muerte. La mayoría de los casos de daño hepático se asocian con el uso de acetaminofén en dosis que exceden los 4000 mg por día, y con frecuencia involucran más de un producto que contiene acetaminofén.

Riesgos del uso concomitante con benzodiacepinas u otros agentes depresores del SNC El uso concomitante de opiáceos con benzodiacepinas u otros depresores del Sistema Nervioso Central (SNC), incluyendo alcohol, puede resultar en sedación profunda, depresión respiratoria, coma y muerte (ver Advertencias y Precauciones, Interacciones farmacológicas).

• Reserve la prescripción concomitante de las tabletas tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén y benzodiacepinas u otros depresores del SNC para uso en pacientes para quienes opciones de tratamiento alternativas no son adecuadas.

• Limite las dosis y duraciones al mínimo requerido.

• Hágale seguimiento a los pacientes por signos y síntomas de depresión respiratoria y sedación.


PRECAUCIONES:

Riesgos para conducir y operar maquinaria: Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén pueden afectar las capacidades mentales o físicas necesarias para realizar actividades potencialmente peligrosas, como conducir un automóvil u operar maquinaria. Advierta a los pacientes que no manejen ni operen maquinaria peligrosa, a menos que toleren adecuadamente los efectos de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén y sepan cómo reaccionarán a la medicación (ver Precauciones, Información para los pacientes).

Reflejo de la tos: La hidrocodona suprime el reflejo de la tos; como con todos los narcóticos, debería tenerse precaución cuando las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén se utilicen en postoperatorios y en pacientes con enfermedad pulmonar.

Información para pacientes:

Adicción, abuso y uso indebido: Informe a los pacientes que el uso de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, incluso cuando se toman según lo recomendado, puede resultar en adicción, abuso y uso indebido, lo que puede conducir a sobredosis y muerte (ver Advertencias). Indique a los pacientes que no compartan las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén con otras personas y que tomen medidas para proteger las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén contra el robo o el uso indebido.

Depresión respiratoria potencialmente mortal: Informe a los pacientes sobre el riesgo de depresión respiratoria potencialmente mortal, indicando que el riesgo es mayor al comenzar el tratamiento con tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén o cuando se aumenta la dosis, y que esto puede ocurrir incluso a las dosis recomendadas (ver Advertencias). Aconseje a los pacientes cómo reconocer una depresión respiratoria y que busquen atención médica sí se desarrolla dificultad respiratoria.

Ingestión accidental: Informe a los pacientes que la ingestión accidental, especialmente en niños, puede resultar en depresión respiratoria o muerte (ver Advertencias). Instruya a los pacientes a tomar medidas para el almacenamiento seguro de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén y a disponer de las tabletas no utilizadas botándolas por el excusado.

Interacciones con benzodiacepinas y otros depresores del SNC: Informe a los pacientes y cuidadores que pueden producirse efectos aditivos potencialmente mortales si se usan las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén con benzodiacepinas y otros depresores del SNC, incluyendo alcohol, y que no los usen concomitantemente a menos que sean supervisados por un médico (ver Advertencias y Precauciones, Interacciones farmacológicas).

Síndrome serotoninérgico: Informe a los pacientes que las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén podrían causar una afección rara, pero potencialmente mortal, resultante de la administración concomitante de fármacos serotoninérgicos. Advierta a los pacientes de los síntomas del síndrome serotoninérgico e indíqueles que busquen atención médica de inmediato si los síntomas aparecen. Instruya a los pacientes que informen a sus médicos si están tomando o planean tomar medicamentos serotoninérgicos (ver Precauciones, Interacciones farmacológicas).

Interacción con Inhibidores de la Monoamino Oxidasa (MAOI): Informe a los pacientes que eviten tomar tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén mientras usan cualquier medicamento que inhiba la monoamina oxidasa.

Los pacientes no deben iniciar los MAOI mientras toman tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén (ver Precauciones, Interacciones farmacológicas).

Insuficiencia suprarrenal: Informe a los pacientes que los opiáceos de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén podrían causar insuficiencia suprarrenal, una condición potencialmente mortal. La insuficiencia suprarrenal puede presentarse con síntomas y signos no específicos como náuseas, vómito, anorexia, fatiga, debilidad, mareos y presión arterial baja. Recomiende a los pacientes que busquen atención médica si experimentan estos síntomas (ver Advertencias).

Instrucciones importantes de administración: Instruya a los pacientes sobre cómo tomar correctamente las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén (ver Dosificación y administración y Advertencias).

Dosis diaria máxima de acetaminofén: Informe a los pacientes que no deben tomar más de 3000 miligramos de acetaminofén por día o 500 miligramos por toma. Recomiéndeles que llamen a su médico si toman más de la dosis recomendada.

Hipotensión: Informe a los pacientes que las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén pueden causar hipotensión ortostática y síncope. Indique a los pacientes cómo reconocer los síntomas de presión arterial baja y cómo reducir el riesgo de consecuencias serias en caso de que se presente hipotensión (por ejemplo, sentarse o acostarse, levantarse cuidadosamente de una posición sentada o acostada) (ver Advertencias).

Anafilaxia: Informe a los pacientes que se ha reportado anafilaxia con ingredientes contenidos en las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén. Indíqueles cómo reconocer tal reacción y cuándo buscar atención médica (ver Contraindicaciones y Reacciones adversas).

Embarazo:

Síndrome de abstinencia de opiáceos en neonatos: Informe a las pacientes femeninas con potencial reproductivo que el uso prolongado de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén durante el embarazo puede resultar en un síndrome de abstinencia de opiáceos en neonatos, el cual puede poner en riesgo la vida si no se reconoce y trata (ver Advertencias y Precauciones, Embarazo).

Toxicidad embriofetal: Informe a los pacientes con potencial reproductivo que las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén pueden causar daño fetal, e instruya a informar a su proveedor de atención médica sobre un embarazo conocido o sospecha de embarazo (ver Precauciones, Embarazo).

Lactancia: Recomiende a las madres lactantes que monitoreen a los bebés por aumento de la somnolencia (más de lo habitual), dificultades respiratorias o flacidez. Indíqueles que busquen atención médica inmediata si se observan estos signos (ver Precauciones, Madres lactantes).

Esterilidad: Informe a los pacientes que el uso crónico de opiáceos puede causar reducción de la fertilidad. No se sabe si estos efectos sobre la fertilidad son reversibles (ver Reacciones adversas).

DOSIFICACIÓN Y ADMINISTRACIÓN:

Instrucciones importantes de dosificación y administración: La dosificación deberá ajustarse de acuerdo a la severidad del dolor y la respuesta del paciente. Sin embargo, debería tenerse presente que la tolerancia a la hidrocodona puede desarrollarse con el uso continuado y que la incidencia de efectos adversos está relacionada con la dosis.

Utilice la dosis efectiva más baja para la duración más corta de acuerdo con las metas individuales del tratamiento del paciente (ver Advertencias). En pacientes que no hayan recibido previamente un opioide se recomienda iniciar con la presentación de 5 mg de Hidrocodona.

Inicie el esquema de dosificación para cada paciente de forma individual, teniendo en cuenta la gravedad del dolor, la respuesta del paciente, la experiencia anterior con tratamiento analgésico y los factores de riesgo de adicción, abuso y uso indebido (ver Advertencias).

Monitoree a los pacientes de manera rigurosa para detectar depresión respiratoria, especialmente dentro de las primeras 24 a 72 horas de iniciar el tratamiento y después de los aumentos de la dosis con tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén y ajuste la dosis en consecuencia (ver Advertencias).

Dosis inicial:

Inicio del tratamiento con tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén en adultos:

Concentración del producto

Dosificación usual para adultos según sea

necesario para el dolor

La dosificación total en 24 horas no debería exceder

5 mg/325 mg

Una tableta cada cuatro a seis horas

8 tabletas

7,5 mg/325 mg

Una tableta cada cuatro a seis horas

8 tabletas

10 mg/325 mg

Una tableta cada cuatro a seis horas

6 tabletas

La decisión de que presentación escoger dependerá de la decisión del clínico y la dosis requerida por cada paciente.

Conversión de otros opiáceos a las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén: Hay variabilidad entre pacientes en la potencia de los fármacos opiáceos y en las formulaciones de opiáceos. Por lo tanto, se recomienda un enfoque conservador al determinar la dosis diaria total de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén. Es más seguro subestimar la dosis de las tabletas bitartrato de hidrocodona y acetaminofén de 24 horas en un paciente que sobreestimarla y tener que manejar una reacción adversa debido a una sobredosis.

Titulación de la dosis y mantenimiento de la terapia: Titule individualmente las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén a una dosis que proporcione una analgesia adecuada y minimice las reacciones adversas. Reevalúe continuamente a los pacientes que reciben tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén para evaluar el mantenimiento del control del dolor y la incidencia relativa de reacciones adversas, así como el seguimiento del desarrollo de adicciones, abuso o uso indebido (ver Advertencias). La comunicación frecuente entre el prescriptor, los demás miembros del equipo de atención médica, el paciente y el cuidador o la familia es importante durante los periodos de cambios en los requerimientos analgésicos, incluyendo la titulación inicial.

Si el nivel de dolor aumenta después de la estabilización de la dosis, intente iden.pngicar la fuente de aumento del dolor antes de incrementar la dosis de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén. Si se observan reacciones adversas inaceptables relacionadas con los opiáceos, considere la posibilidad de reducir la dosis o de cambiar el medicamento. Ajuste la dosificación para obtener un equilibrio adecuado entre el tratamiento del dolor y las reacciones adversas relacionadas con los opiáceos.

Descontinuación de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y de acetaminofén: Cuando un paciente que ha estado tomando tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén regularmente y que puede ser físicamente dependiente ya no requiere terapia con tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, disminuya gradualmente la dosis de 25% a 50% cada 2 a 4 días, mientras realiza seguimiento cuidadoso a los signos y síntomas de abstinencia. Si el paciente desarrolla estos signos o síntomas, eleve la dosis al nivel anterior y disminuya más lentamente, ya sea aumentando el intervalo entre disminuciones, disminuyendo la cantidad de cambio en la dosis o ambos. No suspenda de manera repentina las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén en un paciente físicamente dependiente (ver Advertencias y Abuso y dependencia del medicamento).


VÍA DE ADMINISTRACIÓN: Oral.

SOBREDOSIS: Después de una sobredosis aguda, la hidrocodona o el acetaminofén pueden causar toxicidad.

Presentación clínica:

Hidrocodona: La sobredosis aguda con tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén se puede manifestar en depresión respiratoria, somnolencia progresiva hasta estupor o coma, flacidez del músculo esquelético, piel fría y húmeda, pupilas estrechadas y, en algunos casos, edema pulmonar, bradicardia, hipotensión, obstrucción parcial o completa de las vías respiratorias, ronquidos atípicos y muerte. La midriasis marcada en lugar de la miosis puede observarse con hipoxia en situaciones de sobredosis.

Acetaminofén: La necrosis hepática potencialmente mortal dependiente de la dosis es el efecto adverso más serio de la sobredosis de acetaminofén. También puede ocurrir necrosis tubular renal, coma hipoglucémico y defectos de coagulación.

Los síntomas tempranos posteriores a una sobredosis potencialmente hepatotóxica pueden incluir: náuseas, vómito, diaforesis y malestar general. La evidencia clínica y de laboratorio de la toxicidad hepática puede no ser aparente hasta las 48 a 72 horas después de la ingesta.

Tratamiento de la sobredosis: El tratamiento inmediato incluye apoyo a la función cardiorrespiratoria y medidas para reducir la absorción del medicamento. Oxígeno, fluidos intravenosos, vasopresores, y otras medidas de apoyo deberían emplearse según se indique. La ventilación asistida o controlada también debería considerarse.

Hidrocodona: En caso de sobredosis, las prioridades son el restablecimiento de una vía aérea permeable y protegida y la institución de ventilación asistida o controlada, de ser necesario. Utilice otras medidas de soporte (como oxígeno y vasopresores) en el manejo del shock circulatorio y edema pulmonar, según se indica. El paro cardíaco o las arritmias requerirán técnicas avanzadas de soporte vital.

Los antagonistas opiáceos, naxolona y nalmefeno, son antídotos específicos contra la depresión respiratoria que resulta de la sobredosis con opiáceos. Para la depresión respiratoria o circulatoria clínicamente significativa secundaria a la sobredosis con tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, administre un antagonista opiáceo. Los antagonistas opiáceos no se deben administrar en ausencia de depresión respiratoria o circulatoria clínicamente significativa secundaria a la sobredosis con tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén.

Debido a que se espera que la duración de la reversión opiácea sea inferior a la duración de la acción de la hidrocodona en las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, monitoree cuidadosamente al paciente hasta que la respiración espontánea se restablezca de forma segura. Si la respuesta de los antagonistas opiáceos es insuficiente o no es constante, administre un antagonista adicional como se indica en la información para prescribir del producto.

En un individuo físicamente dependiente de los opiáceos, la administración de la dosis usual recomendada del antagonista precipitará el síndrome de abstinencia agudo. La severidad de los síntomas de abstinencia experimentados dependerá del grado de dependencia física y de la dosis del antagonista administrado. Si se toma una decisión para tratar la depresión respiratoria seria en el paciente físicamente dependiente, la administración del antagonista se deberá iniciar con cuidado y mediante titulación de la dosis con dosis más pequeñas de las usuales del antagonista.

Acetaminofén: La desintoxicación gástrica con carbón activado debe administrarse justo antes de la N- acetilcisteína (NAC) para disminuir la absorción sistémica si se conoce o se sospecha que la ingestión de acetaminofén ocurrió a pocas horas de la presentación. Los niveles séricos de acetaminofén deben obtenerse inmediatamente si el paciente se presenta 4 horas o más después de la ingestión para evaluar el riesgo potencial de hepatotoxicidad; los niveles de acetaminofén obtenidos menos de 4 horas después de la ingestión pueden ser engañosos. Para obtener el mejor resultado posible, debe administrarse la NAC tan pronto como sea posible cuando se sospeche un daño hepática inminente o en evolución. Se puede administrar NAC por vía intravenosa cuando las circunstancias impidan la administración oral.

Se requiere exhaustiva terapia de soporte en intoxicación severa. Los procedimientos para limitar la absorción continua del medicamento deben llevarse a cabo rápidamente puesto que el daño hepático depende de la dosis y ocurre en forma temprana en el curso de la intoxicación.


ABUSO Y DEPENDENCIA DEL MEDICAMENTO:

Sustancia controlada: Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén contienen hidrocodona, una sustancia controlada dentro del listado de sustancias fiscalizadas en Colombia.

Abuso: Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén contienen hidrocodona, una sustancia con un alto potencial de abuso similar a otros opiáceos, que puede ser no solo abusada sino también objeto de uso indebido, adicción y desviación criminal (ver Advertencias).

Los pacientes tratados con opiáceos requieren un cuidadoso seguimiento de los signos del abuso y adicción, debido a que el uso de productos analgésicos opiáceos conlleva el riesgo de adicción incluso con un uso médico apropiado.

El abuso de medicamentos de prescripción es el uso no terapéutico intencional de un medicamento recetado, incluso una sola vez, por sus efectos psicológicos y fisiológicos gra.pngicantes.

La adicción a un medicamento es un conjunto de fenómenos conductuales, cognitivos y fisiológicos que se desarrollan después del consumo repetido de sustancias e incluye un fuerte deseo de tomar el medicamento, dificultades en controlar su uso, persistencia en su uso a pesar de las consecuencias perjudiciales, darle una alta prioridad al uso del medicamento por encima de otras actividades y obligaciones, aumento de tolerancia y, algunas veces, abstinencia física.

La conducta de “búsqueda de medicamentos” es muy común en personas con desórdenes del uso de sustancias. Las tácticas para búsqueda de medicamentos incluyen llamadas o visitas de emergencia cerca del final de las horas laborales, rehusar someterse a un examen apropiado, pruebas o remisión, “pérdida” repetida de prescripciones, falsificación de prescripciones y renuencia en suministrar los registros médicos previos o información de contacto para otros médicos tratantes. “Visitar diferentes médicos” para obtener prescripciones adicionales es común entre los abusadores de medicamentos y la gente que sufre de adicción no tratada. La preocupación por lograr un alivio adecuado del dolor puede ser la conducta correspondiente en un paciente con un control deficiente del dolor.

El abuso y la adicción son independientes y diferentes de la dependencia física y la tolerancia. Los médicos deben tener en cuenta que es posible que a la adicción no esté acompañada de una tolerancia simultánea y síntomas de dependencia física en todos los adictos. Además, el abuso de opiáceos se puede presentar en ausencia de una verdadera adicción.

Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén, como otros opiáceos, pueden desviarse para uso no médico en canales de distribución ilícitos. Se recomienda enfáticamente que se mantenga un registro riguroso de la información de la prescripción, incluyendo la cantidad, frecuencia y solicitudes de renovación. La valoración apropiada del paciente, las prácticas de prescripción apropiadas, la re evaluación periódica de la terapia, y la distribución y almacenamiento apropiados son las medidas idóneas que ayudan a limitar el abuso de medicamentos opiáceos.

Riesgos específicos del abuso de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén. Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén son para uso oral únicamente, y presentan riesgos de sobredosis y muerte. El riesgo se incrementa con el abuso simultáneo de tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén con alcohol y otros depresores del sistema nervioso central.

El abuso de medicamentos parenterales se asocia frecuentemente con la transmisión de enfermedades infecciosas como la hepatitis y el VIH.

Dependencia: Tanto la tolerancia como la dependencia física se pueden desarrollar durante el tratamiento crónico con opiáceos. La tolerancia es la necesidad de aumentar las dosis de opiáceos para mantener un efecto definido como la analgesia (en ausencia de la progresión de la enfermedad u otros factores externos). La tolerancia se puede presentar tanto en los efectos deseados como los no deseados de los medicamentos, y se puede desarrollar en diferentes tasas para efectos diferentes.

La dependencia física da como resultado síntomas de abstinencia después de la suspensión repentina o reducción significativa de la dosificación de un medicamento. La abstinencia también se puede precipitar a través de la administración de medicamentos con actividad antagonista opiácea (por ejemplo, naxolona, nalmefeno), analgésicos agonistas/antagonistas mixtos (por ejemplo, pentazocina, butorfanol, nalbufina) o agonistas parciales (por ejemplo, buprenorfina). La dependencia física puede no presentarse en un grado clínicamente significativo hasta después de varios días a semanas del uso continuo de opiáceos.

Las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén no se deben suspender de manera abrupta en un paciente físicamente dependiente (ver Dosificaión y administración). Si las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén se suspenden de manera abrupta en un paciente físicamente dependiente, se puede presentar síndrome de abstinencia. Los siguientes, uno o todos, pueden caracterizar este síndrome: desasosiego, lagrimeo, rinorrea, bostezos, transpiración, escalofríos, mialgia y midriasis. También se pueden desarrollar otros signos y síntomas, incluyendo irritabilidad, ansiedad, dolor de espalda, dolor en las articulaciones, debilidad, cólicos, insomnio, náuseas, anorexia, vómito, diarrea o aumento de la presión arterial, de la frecuencia respiratoria o del ritmo cardíaco.

Los bebés nacidos de madres físicamente dependientes a opiáceos también serán físicamente dependientes y pueden presentar dificultades respiratorias y signos de abstinencia (ver Precauciones, Embarazo).

DESCRIPCIÓN: El bitartrato de hidrocodona y acetaminofén está disponible en forma de tableta para administración oral.

El bitartrato de hidrocodona es un analgésico opiáceo y se presenta como cristales finos blancos, o como un polvo cristalino. Es fotosensible. El nombre químico es: 4,5α-epoxi-3- metoxi-17-metilmorfinan-6-ona tartrato (1:1) hidrato (2:5). Tiene la siguiente fórmula estructural:

Bitartrato de hidrocodona

C18H21NO3 • C4H6O6 • 21/2H2O PM = 494.490

El acetaminofén, 4’-hidroxiacetanilida, un polvo cristalino, blanco, inodoro, ligeramente amargo, es un analgésico y antipirético no opiáceo, no salicilato. Tiene la siguiente fórmula estructural:

Acetaminofén: C8H9NO2 PM = 151.16

Cada tableta de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén contiene:

Tableta

Bitartrato de Hidrocodona USP

Acetaminofén USP

5 mg/325 mg

5 mg

325 mg

7,5 mg/325 mg

7,5 mg

325 mg

10 mg/325 mg

10 mg

325 mg

En adición cada tableta contiene los siguientes ingredientes inactivos: crospovidona, estearato de magnesio, celulosa microcristalina, povidona, almidón pregelatinizado, dióxido de silicio y ácido esteárico.

CARCINOGÉNESIS, MUTAGÉNESIS, IMPEDIMENTO DE LA FERTILIDAD:

Carcinogénesis: No se han realizado estudios a largo plazo para evaluar el potencial carcinogénico de la combinación de las tabletas de bitartrato de hidrocodona y acetaminofén.

Estudios a largo plazo en ratones y ratas han sido completados por el Programa Nacional de Toxicología para evaluar el potencial carcinogénico del acetaminofén. En los estudios de dos años de alimentación, las ratas F344/N y los ratones B6C3F1 recibieron una dieta que contenía acetaminofén de hasta 6000 ppm. Las ratas hembras demostraron evidencia equívoca de actividad carcinogénica basada en un aumento de la incidencia de leucemia de células mononucleares a 0,8 veces la máxima dosis diaria en humanos (MHDD) de 4 gramos/día, con base en una comparación del área de superficie corporal. En contraste, no hubo evidencia de actividad carcinogénica en ratas macho que recibieron hasta 0,7 veces o ratones hasta 1,2 a 1,4 veces la MHDD, sobre la base de una comparación del área de superficie corporal.

Mutagénesis: En la literatura publicada, se ha informado que el acetaminofén es clastogénico cuando se administra a 1500 mg/kg/día al modelo de rata (3,6 veces el MHDD, con base en una comparación del área de superficie corporal). En contraste, no se observó clastogenicidad a una dosis de 750 mg/kg/día (1,8 veces la MHDD, con base en una comparación del área de superficie corporal), lo que sugiere un efecto umbral.

Deterioro de la fertilidad: En estudios realizados por el Programa Nacional de Toxicología se han realizado evaluaciones de fertilidad con acetaminofén en ratones CD-1 suizos mediante un estudio de reproducción continua. No hubo efectos sobre los parámetros de la fertilidad en ratones que consumieron hasta 1,7 veces la MHDD de acetaminofén, sobre la base de una comparación del área de superficie corporal. Aunque no hubo efectos sobre la motilidad espermática o la densidad espermática en el epidídimo, hubo un aumento significativo en el porcentaje de espermatozoides anormales en ratones que consumieron 1,78 veces la MHDD (con base en una comparación del área de superficie corporal) y hubo una reducción en el número de parejas apareadas que produjeron una quinta camada a esta dosis, lo que sugiere el potencial de toxicidad acumulativa con la administración crónica de acetaminofén cerca del límite superior de dosificación diaria.

Estudios publicados en roedores informan que el tratamiento oral con acetaminofén en animales macho en dosis 1,2 veces la MHDD y mayores (con base en una comparación del área de superficie corporal) resultan en disminución del peso testicular, reducción de la espermatogénesis, reducción de la fertilidad y reducción de los sitios de implantación en hembras a las que se les administraron las mismas dosis. Estos efectos parecen aumentar con la duración del tratamiento. No se conoce la importancia clínica de estos hallazgos.

Esterilidad: El uso crónico de opiáceos puede reducir la fertilidad en hembras y machos con potencial reproductivo. No se sabe si estos efectos sobre la fertilidad son reversibles (ver Reacciones adversas).

PRESENTACIÓN COMERCIAL: Se presenta en caja plegadiza por 1, 2, 10, 30 y 90 tabletas. Es posible que no todas las presentaciones se comercialicen el país.

SINALGEN® 5 mg/325 mg: Caja por 10, 30 y 90 tabletas (Reg. San. No. INVIMA 2014M-0015124).

SINALGEN FORTE® 7.5 mg/325 mg: Caja por 30 tabletas (Reg. San. No. INVIMA 2018M-0018042).

SINALGEN MAX® 10 mg/325 mg: Caja por 30 tabletas (Reg. San. No. INVIMA 2018M-0018067).

Fabricante:

SpecGx LLC., Hobart, New York 13788, Estados Unidos de América (USA)

Acondicionador: Pharmetique S.A. - Carrera 65B No. 13-13 - Bogotá, Colombia

Importador mayor información en el Departamento Médico de:

GRÜNENTHAL COLOMBIANA S. A.

Calle 93 No. 16-20 Bogotá, D. C. - Teléfono: (1) 6185550

Línea Gratuita Nacional: 018000 1111 04 - Fax: (1) 5302961

Correo electrónico: dirmedica@grunenthal.com

ALMACENAMIENTO: Almacénese a temperaturas no mayores a 30 °C. Manténgase fuera del alcance y vista de los niños.